Taxi en Praga
Agresividad de los taxistas praguenses
En Praga es preferible no coger taxi, porque es casi imposible encontrar un conductor serio. A los turistas les cobran siempre más de lo normal. Si es necesario coger un taxi (p.ej. por perderse o para no perder el tren) y si el coche no está dotado del contador, pacte el precio antes para evitar que le timen.
Los taxistas en Praga son a veces muy agresivos y algunos andan provistos de pistolas y asientos eléctricos por si el cliente se niegue a pagar. Si debe tomar taxi, asegúrese haber acordado el precio antes de emprender el viaje. El taxi debería arrancar con el taxímetro en marcha.
Hubo muchos casos de comportamiento agresivo por parte de los taxistas cuando los clientes se negaban a pagarles un precio disparatado. Vuelvo a repetir que es importante pactar el precio antes de subir al coche.
Advertencia para los clientes
• No suba al taxi aparcado delante de una estación de trenes o en una de las localidades turísticas mencionadas. Los mayoría de los taxistas allí parados están abusando de los turistas reción llegados y les suelen aplicar las tarifas tres veces superiores a las normales.
• Si le urge tomar un taxi en la calle, asegúrese que se trata de un verdadero taxi autorizado. El rótulo de techo iluminado no debe estar fijado provisionalmente y debe llevar escrito en ambos lados con letras negras la palabra TAXI. En ambas protezuelas delanteras debe figurar el nombre de la empresa, el número de licencia y la tarifa.
• Intente averiguar antes cuánto costará su viaje. Si toma un taxi en la calle, es preferible preguntar al conductor sobre el precio antes de subir o antes de pagar y averiguar que el precio es proporcional. Si pide un taxi por teléfono (recomendable), podrá solicitar a la centralita que le haga un cálculo aproximativo.
• Una vez dentro del coche, averigue que la tarifa en el taxímetro corresponde a las indicadas en el tarjetón de tarifas colocado en el saplicadero delantero. Si la tarifa no conjuga, dígaselo al chófer o pídale que pare para bajar.
• Puede solicitar al taxista que le imprima un resguardo. Si se niega a hacerlo, podrá negarse a pagarle.
Da pena que uno de los mayores problemas que molestan a los turistas que visitan a Praga sea el trato deshonesto de algunos taxistas.
Los taxistas que estafan a los clientes corren riesgo de ser severamente castigados y multados. El castigo más severo es la privación de licencia. Sin embargo, parece que dichos castigos no les dan mucho miedo por muy severos que sean.
Nosotros, igual que ustedes, les odiamos! Los checos no soportan a los taxistas deshonestos, e igualmente de desdeñan a los policías.
Otro consejo: En caso de que tenga la sensación de que el taxista quiere timarle, apúnte su número de registro, p. ej., en su teléfono móvil. Se reducirá notablemente la probabilidad de que le time.
Sea listo y pida un taxi por teléfono a una de las empresas de confianza y de buen trato.